Conquistando al Comisario: Capítulo 6

domingo, 2 de marzo de 2014

¡¡¡Buen día domingo mis readers!!! 
¿Cómo están? Espero que hayan tenido una gran semana, porque la mía fue genial. Terminé de trabajar, ahora me tomo una semanita de descanso para luego entrar a clases, algo que no me tiene muy emocionada, pero bueno, para ser lo que uno quiere hay que esforzarse. Y la Universidad es lo mismo que esfuerzo, sobre todo si se está estudiando enfermería jaja.
Les comento, vuelven las actualizaciones semanales, por ahora serán los domingos, dependiendo de mis clases iré actualizando. Ya se viene el segundo libro de "¿Quién necesita Navidad?" para quienes lo estén esperando, con el elfo Cave como protagonista.
No queda mucho para terminar las aventuras de nuestro comisario, luego de eso viene el tercer libro de la serie, con el que espero dar por terminado muchos puntos que quedarán abiertos con Conquistando al Comisario. Luego de eso, como ya les había comenta, viene el libro de Andy, entenderán que pasaran algunos muchos años jajaja. Haber si escribo algún especial relatando algunos sucesos de su vida junto a Liam y Jon en formato de diario, de la misma forma que hice con Liam. :)
Y esos serían todos los datitos por ahora, un beso enorme y espero sus comentarios respecto al capítulo. ¡¡Ya queda poco!! 
Besos enormes a cada un@.
Chauuuu :)


Capítulo 6
—Sam, deja de dar vueltas y vete de una vez.
—Está bien, está bien. Me voy, cualquier cosa me avisas.
—Sí, no te preocupes por eso. 
—Logan, no creas…
—Sam, creo que ya lo hablamos.
—Sí, está bien. Lo entiendo, adiós. —Blayze rió viendo la escena. Definitivamente esos hombres eran más amigos que pareja. Sí, puede que durmieran juntos todas las noches y que la cama no dejara de sonar cuando estaban en la habitación, pero eran definitivamente amigos. No amantes. A Sam no le brillaban los ojos como le brillaban con Henry Togo. 
Le hizo un gesto con la mano que el comisario despreció y luego lo vio salir.
—¿Ves que tengo razón, detective? Él se va a pasar el día con otro hombre y a ti pareciera no importarte.
—No te metas en lo que no entiendes, mocoso.
—Lo entiendo, tengo 20 años, no soy un adolescente en busca de su identidad. Lo que no entiendo es, ¿por qué demonios se acuestan si no tienen nada serio? Así solo van a lograr que la posible amistad que pueden tener se rompa y terminen todos enfadados y enojados y con ganas de matarse el uno al otro.
Logan suspiro y dejó el portátil aun lado mirando a Blayze. —Con Sam sabemos perfectamente lo que tenemos, los dos tenemos las cosas claras, que es una de las razones por las que ahora está con Henry y su hija y no aquí, encerrado intentando investigar un maldito caso…
—…en el que mi hermana de 6 años está involucrada. 
—Sí, pero esto no quiere decir que él no esté interesado en continuar con esto.
—Lo sé… —Blayze suspiró y caminó dejándose caer al lado de Logan—. Yo solo quiero que todo vuelva a ser normal, quiero que me lleves a mi casa junto a mi hermana y olvidar que todo esto pasó. No quiero meterme entre tu… amigo y tú, pero me dan los detalles.
—No te los damos.
—Bueno, pero me hacen escucharlos, verlos… No me digas que no de mi opinión cuando todos los días escucho esa cama sonar. —Logan tuvo la decencia de parecer avergonzado, lo que solo hizo que Blayze riera a carcajadas seguido de Logan.
—Listillo.
—Sí, lo sé. —Luego de unos minutos en silencio, Blayze dejó salir el aire de sus pulmones—. Dime una cosa, detective, ¿queda mucho tiempo para tener a mi chica conmigo?
—Espero, de verdad espero, que no. Y que en menos de una semana tu hermana esté con nosotros. —Blayze asintió, dejando que su cabeza descansara en el brazo del más grande.
—Gracias por no matarme y ponerme en la misma categoría que todos los bichos malos.
—No me has dado razón para hacer lo contrario, chiquillo.

—¡Tío Sammy! —gritó Rachel mientras salía corriendo de la casa para recibir a Sam—. ¡Que genial que hayas venido! —Ella envolvió sus brazos alrededor de la cintura del comisario.
—Oye, chica, cada vez estás más alta.
—Sí, mi papá dice que es por los genes de mi abuelo y de él.
—Cierto, tú abuelo es alto y tu papá, bueno, es más alto que yo al menos.
—Tío, muchos son más altos que tu —bromeó ella.
—¿Me estás tratando de pequeño?
—Eres pequeño, comisario, enfréntalo —dijo Henry desde el pórtico. Sam elevó la mirada y no pudo evitar recorrer todo el cuerpo del vaquero. Parecía que se había vestido especialmente para la ocasión. 
Bastardo, pensó.
—Y bueno, ¿quién más está invitado?
—Tía Camil con mis primos, pero no pudieron venir, me trajeron el regalo, pero se tuvieron que ir rápido, así que solo seremos tú, papá y yo.
—Oh… —Sam miró a Henry con sospecha.
—Juro por mi abuelo que no tuve nada que ver, comisario, mi hermana de verdad tuvo otras cosas que hacer.
—¿No nos crees tío? —preguntó la chica mirando a Sam con ojos tristes.
—Claro que sí, guapa. —La tranquilizo con una sonrisa—. Entonces, ¿cuál es el plan?
—Ella es la cumpleañera, ella elige. —Sam y Rachel se acercaron a la casa y entraron, con Henry siguiéndolos.
—Quiero ir a cabalgar y que tengamos una noche de campamento, ¿podemos? —Sam negó de inmediato.
—Lo siento, chica, pero no puedo pasar la noche aquí, tengo mucho trabajo.
—Vamos, tío Sammy, el trabajo puede esperar una noche…
—Me temo que esto no, pero prometo que te lo compensaré. 
—Tío…
—Rich, el trabajo de Sam es importante, vamos, piensa en otra cosa. —Sam sonrío a Henry agradecido por la ayuda.
—Está bien —dijo ella nada contenta—. ¿Picnic en el lago? 
—Ahora, esa es una muy buena idea. 
—Sí, está bien, tenemos de todo, así que podrías ir a buscar tu traje de baño y mientras yo preparo la canasta para llevar.
—Sí, papi —Ella subió corriendo las escaleras a su cuarto.
—Henry…
—Hablo en serio, Sam —dijo Henry caminando a la cocina—. Yo no planeé esto entre los tres, de verdad estaban invitados los primos de Rich y Camil.
—Está bien, te creeré.
—Pero eso no significa que voy a desaprovechar la oportunidad. —Henry sonrió socarronamente y sin previo aviso le robó un beso a Sam.
—¡Hey!
—Estoy conquistando al comisario.
—Henry…
—Solo disfruta un poco, Sammy, ¿puedes hacerlo, verdad? —Sam tenía dudas al respecto, pero asintió de todas maneras, después de todo estaba ahí por Rachel y no por Henry, o al menos eso se estaba diciendo en la mente mientras miraba la espalda y el trasero de Henry moverse por la cocina.
—Está bien, disfrutaré.
Una hora después, estaban los tres cabalgando hacia el lago, Sam había tomado un caballo que solía usar cuando visitaba a Henry tiempo atrás. Rachel montaba a la perfección su propio caballo y Henry iba adelante, guiando el camino. Sam no pudo evitar mirar la ancha espalda del vaquero, viendo la camisa extenderse como si estuviera a punto de romperse. Sus vaqueros se sintieron apretados de solo recordar las marcas que había dejado con sus uñas en esa espalda morena.
—¿Creen que aquí estará bien? —preguntó Henry deteniéndose cerca de unos grandes árboles que rodeaban el pequeño lago en esas tierras.
—Creo que tu hija ya lo decidió —comentó Sam divertido mientras veía a Rich desmontar y acariciar a su caballo.
—Me gusta aquí, papi, ¿puedo ir a ponerme mi bañador? —Henry volteó la cabeza y asintió antes de desmontar, Sam hizo lo mismo y dejaron los caballos sueltos, dejando que hicieran lo que quisieran.
—¿Te ayudo a acomodar las cosas?
—No, así está bien —Henry estiró una manta blanca en el suelo y puso la canasta con la comida en el medio—. Ven, comisario, no te comeré.
—Lo estoy dudando en este momento —bromeó Sam acercándose y dejándose caer frente a Henry.
—¿De verdad?
—No. —Ambos rieron. Rachel salió de detrás de un árbol con su bañador puesto, dejó la ropa en el suelo y se lanzó al agua—. Tu hija sigue pareciendo un animal marino.
—Sí, ama nadar. No creo haber conocido a alguien como ella, excepto Susana.
—Bueno, por algo es su madre. —Henry asintió pensativo, como si estuviera decidiendo si hablar o no.
—Dilo.
—Decir, ¿qué?
—Lo que sea que quieras decir, estás pensando demasiado duro. —Henry sonrió.
—Muy perspicaz, Sam Montero.
—Siempre.
—Estaba pensando en esta mañana… ¿con quién estabas? —Sam miró a Rachel nadar y suspiró. No sabía si decirle o no la verdad, pero si no lo hacía Henry pensaría que era un puto que se acostaba con cualquiera.
—Yo… Logan —dijo finalmente. Miró a Henry que lo miraba sorprendido.
—Sam, sé que su muerte te afectó, pero…
—No, él está vivo… —Miro sus dedos jugando con los hilos de la manta—. Fue todo una cubierta para engañar a ese maldito de Baldrick. —Henry guardó silencio por varios segundos, no podía creer que se alegrara de que el detective estuviera vivo, pero algo dentro de sí mismo lo alivió.
—¿El que escapó de la cárcel? —Sam asintió. 
—¿Lo supiste todo el tiempo?
—No… Si… Al día siguiente de que lo supiéramos por las noticias, Ángel apareció y me lo contó todo. No se lo menciones a nadie, esto realmente es peligroso.
—Entiendo… —respondió Henry—. Me alegro de que me lo hayas contado. —Alcanzó la mano de Sam y la entrelazó con la suya—. No podía creer que estuvieras con otra persona que no fuera él ni yo. —Sam frunció el ceño.
—Eso suena increíblemente ridículo, vaquero.
—Lo sé, pero creo que es al único que veré como rival.
—Henry, no tenemos 15 años, así que no actúes como tal, yo puedo acostarme con quien quiera. —Henry sonrió de medio lado y acercó su rostro al de Sam.
—Sé que puedes, pero no la harás.
—¿Por qué? —preguntó Sam en un susurro.
—Porque no eres un puto.
—Hey, tu hija está a pocos metros, no digas esas palabras —Ambos rieron.
—Créeme, ha escuchada palabras peores viniendo de Camil y Kellie.
—Te creo, mi secretaria es igual. Las mujeres maldicen más que nosotros.
—Totalmente de acuerdo. —Henry puso distancia entre los dos, algo que Sam lamentó, estaba increíblemente cómodo en ese momento, le hacía olvidar por unos minutos a lo que se estaría enfrentando en los próximos días.
—Henry… ¿Realmente piensas que nosotros podemos estar juntos? Tienes una hija y…
—Ella te adora, Sam, lo sabes, así que no es una excusa. Yo… yo lamenté todo este tiempo lo que sucedió —comento mirando a su hija—. En realidad no lo que sucedió, sino el cómo. Entendí lo molesto que estabas y fui culpable por no haber insistido para poder explicarte, pero todo sucedió muy rápido. Susana estaba con su tratamiento que la hacía estar más débil cada día, luego vino el parto adelantado y falleció. De repente me vi con una pequeña cosita entre mis manos y entendí que todo lo que hiciera en mi vida sería por ella. 
—No fui tu prioridad.
—No es eso…
—Lo entiendo, Henry, realmente lo entiendo. Dejando de lado la mentira o lo que sea que haya sido, creo que fue muy leal de tu parte darle la posibilidad a Susana de ser madre, aunque ella no lo haya disfrutado.
—Quizás no tuvo a Rich en sus brazos, pero vivió su embarazo feliz, era lo único que la mantenía radiante. Comprar las cosas para el bebé, su ropa, sus juguetes, preparar su habitación. Ella falleció, pero dejó un pedacito de ella en la tierra y sus padres lo agradecieron. Hasta ahora ellos son las personas que más difícil han hecho mi trabajo como padre, no dejan de consentir a mi hija —comentó sonriendo y Sam pensó que era simplemente magnífico. La felicidad de un padre mientras miraba a su hija jugar en el agua.
—Creo que has hecho un gran trabajo con tu hija, Henry. Ella se convertirá en una gran mujer algún día.
—Y espero que ese día llegué muy lejos, no estoy preparado para tener ciertas charlas que se supone debería tener con su madre. —Sam rió divertido.
—Bueno, ella tiene a su tía.
—Sí, pero conociendo a esa mujer, estoy seguro que dirá las cosas de una manera poco adecuada para una niña de 10 años.
—11.
—¿Uh?
—Tu hija, ya no tiene 10 años, tiene 11. —Henry miró a Sam y luego a Rich, sonrió.
—Tienes razón. 11 años.
—Henry, hay algo…
—¡Papi! ¡Ven, mira, es un pez de colores! ¡Tío Sam, ven a ver! —Ambos se pusieron de pie y se acercaron al lago—. ¿Aún no se han puesto sus bañadores? ¿¡Qué esperan?! El pez se irá. Rápido, rápido.
—Bueno, la chica manda —dijo divertido Henry.
—Estoy de acuerdo. —Se sonrieron el uno al otro antes de quitarse la ropa, ambos tenían sus short bajo los pantalones—. ¡El último en llegar ordena todo! —gritó Sam como un adolescente mientras corría al agua.

—¡Lo tenemos! Está a 10 kilómetros de donde estás ahora, compañero. Localizaron su móvil.
—¿Los dos? ¿Baldrick y Wilfert?
—No, solo WIlfert, creemos que tiene a la niña con él, lo he vigilado salir y entrar de una casita abandonada. Siempre solo, pero lleva comida todo el tiempo.
—Bien, no hagas nada. Tenemos que planear algo con Sam, te diré los detalles, no dejes que escape.
—No te preocupes, amigo, tengo a este maldito en la mira, un paso en falso y le disparo.
—Está bien, si haces eso te ayudaré a esconder el cuerpo.
—Trato. —Riendo cortaron la comunicación.
—¿Y bien?
—Tenemos a Wilfert, eso significa…
—Que tienen localizada a mi hermana —Blayze saltó de la emoción y se lanzó a los brazos de Logan, quien lo recibió por reflejo—. Dios, gracias, no lo puedo creer, mi hermanita…
—Tranquilo, no te emociones hasta que tengamos a tu hermano con nosotros.
—No entiendes, yo creí que ella podría estar muerta o dañada o…
—Blayze, aún no sabemos su estado. Ni si quiera confirmamos que estuviera con él.
—Aun así, es una pista. Lo único que tenemos —Blayze suspiró y se alejó—. Gracias, Logan, gracias, de verdad, gracias. 
—No me agradezcas hasta que…
—Gracias de todas maneras. Pase lo que pase, estoy muy agradecido por todo lo que has hecho. —Logan observó a Blayze con otros ojos, ya no veía a un niño entrometido, si no que a un hombre preocupado y realmente agradecido.
—Cuando hablas así, si pareces adulto. —Blayze le dirigió una mirada divertida.
—Detective Armijo, por si no te has dado cuenta yo soy un adulto, que de vez en cuando me comporte como un adolescente no me convierte en uno.
—¿Solo de vez en cuando? —preguntó Logan enarcando una ceja.
—Sí, solo de vez en cuando. 
—Está bien, Blayze el adulto. 
—No me llames así —dijo el menor riendo y golpeando suavemente la pierna del moreno.

—¡Por Dios! No recuerdo cuando fue la última vez que me divertí tanto —comentó Sam dejándose caer en el sofá de Henry.
—Sí, eso pasa cuando estás conmigo.
—Sigues siendo un bastardo arrogante —comento divertido—. ¿Rich ya se durmió?
—Sí, estaba muerta.
—Bueno, si no estuviera cansada después de nadar todo el día me preocuparía.
—Eso no es nada, no la has visto en sus días de creerse entrenadora de caballos.
—¿Le gusta entrenar?
—Sí, ella lo ve como su futuro. Después de clases y hacer sus deberes, no piensa en otra cosa.
—Lo hará genial. En realidad, cualquier cosa que haga lo hará bien.
—Lo sé, pero viniendo de mí no es un comentario objetivo. Soy el padre y todo lo que haga lo voy a encontrar maravilloso. —Sam asintió estando de acuerdo—. ¿Quieres una copa de vino?
—No creo que sea buena idea, tengo que manejar de regreso y ya está oscuro. Con una cerveza me conformo.
—¿Otra? Ya has bebido media docena —bromeó Henry.
—¿Me estás diciendo borracho?
—Para nada, comisario, para nada. —Henry fue a la cocina por un par de cervezas y una fuente de aceitunas, se sentó al lado de Sam—. Toma.
—Gracias. —Sam bebió un trago—. Gracias por invitarme, de verdad lo pasé bien.
—Gracias por venir y no fui yo quien te invitó, aunque las circunstancias digan lo contrario, mi hija fue la de la idea.
—¿Y la de no invitar a sus tías y sus primos también fue su idea?
—Oye, fueron invitados, pero no pudieron venir, ya te lo dije. —Sam no lo creyó una palabra—. ¿No me crees? 
—No.
—¿Y para qué omitiría la invitación?
—Se me ocurren varias ideas, pero la principal, porque querías estar a solas conmigo. —Sam lo miro de reojo, y Henry soltó una carcajada.
—Ya veo que el alcohol te soltó la lengua, comisario. —Sam solo sonrió—. Aunque esa idea es fantástica, no lo hice. Pero no fue necesario, el destino solito hizo el trabajo, sin mi ayuda.
—¿El destino? ¿Desde cuándo crees en el destino?
—Desde ahora.
—Solo porque te conviene.
—No realmente, más bien porque me permitió tenerte para mí por un día completo.
—Cursi.
—¿Cursi? Antes amabas que te dijera cursilerías.
—¡No es cierto!
—Estás cambiando el tema, Sam. 
—Descubierto. Pero, realmente fue una frase ensayada.
—No lo fue, realmente quería tenerte para mí y ni si quiera fue planeado. Y lo disfruté. Mucho. —Henry miró directamente a los ojos de Sam, que por un momento brillaron como hace once años—. ¿Tú no lo disfrutaste, Sammy?
—Ya te dije que sí —susurró en respuesta.
—¿Logan sabe que pasaste el día conmigo y mi hija? —Sam asintió.
—Él fue el que insistió en que viniera.
—Ese tipo me hace difícil odiarlo. —Sam lo miró divertido.
—¿Por qué lo odiarías? Logan es una persona genial.
—Sí, sí, lo sé. Pero es mi rival.
—¿En serio? ¿Otra vez con eso? —preguntó Sam poniéndose de pie y riendo—. No es tu rival en nada, Henry.
—Solo es una manera de decirlo. —Henry también se puso de pie y caminó hasta rodear a Sam por la espalda, acomodando su barbilla en su hombre, dejando su mano en su abdomen—. Él está en el medio. Estoy seguro que si Logan no estuviera, tú y yo estaríamos juntos.
—En primer lugar, si él no estuviera ni si quiera te hubiera escuchado, ¿lo recuerdas? —Henry suspiró, enviando escalofríos al cuerpo de Sam.
—Cierto, se me olvidaba. —Henry se inclinó besando delicadamente el cuello del comisario—. Dime la verdad, Sammy, ¿tenemos alguna oportunidad? —Sam suspiró y asintió.
—Eso creo… Aún no estoy seguro, no podemos intentar revivir el pasado.
—No quiero que seamos los mismos del pasado, Sam, quiero que hagamos una vida juntos.
—¿Por qué ahora, Henry? —preguntó Sam girándose y alejándose del vaquero, apoyándose contra la encimera—. ¿Por qué ahora y no hace 5 años atrás?
—No lo sé. —Henry pasó sus manos por su rostro—. Debí haber intentado más duro, y te he pedido disculpas muchas veces ya. Sé que debí hablar contigo en ese mismo momento, pero también te expliqué, yo he estado concentrado en criar a mi hija.
—Aún la seguirás criando, Henry.
—Sí, pero ahora ella tiene edad suficiente para entender que quién amo es un hombre. —Sam miró los ojos de Henry y en un milisegundo recordó por todo lo que habían pasado juntos. Cómo se conocieron, como se conquistaron mutuamente, sus noches de cine junto a Mitch, su primer beso, su primera vez haciendo el amor.
—No te aseguro nada, pero creo que podemos empezar desde cero. Juntos. 
—Gracias, cariño, no te arrepentirás. —Henry se estaba acercando para besarlo, pero Sam se alejó.
—No, primero tengo que hablar con Logan. Nosotros tenemos una especia de relación.
—Está bien. No te arrepentirás, te lo aseguro.
—Eso espero… —Sam sonrió y miró la puerta—. Me tengo que ir, hay mucho que hacer.
—Dile a Logan que me alegro que esté bien… en serio. —Sam asintió antes de salir, miró al cielo y corrió a su camioneta, sintiéndose aliviado, pero antes de que pudiera entrar vio movimiento en la parte trasera de la casa. Se detuvo en seco al ver lo que estaba pasando.
—Hijo de puta —susurró Sam viendo a Wilfert apuntar una pistola a Rachel, que estaba en su pijama y con la boca cubierta por tela blanca—. No te atrevas a tocarla, maldito —gruñó Sam.
—Pero si es mi antiguo amigo, Sam Montero. ¿Cómo estás? ¿Vienes a saludar?
—Sam, por qué no… ¿Sam? —Henry salió de la casa y observó a Sam que miraba hacia la parte trasera de la casa, caminó hasta el comisario y observó hacia donde miraba él—. ¡Rachel! —gritó ya corriendo hacia el hombre que tenía a su hija.
—No des un paso, Henry Togo, o tú hija se muere. —Wilfert presionó el cañón contra la cabeza de Rich, que no paraba de llorar.
—Déjala en paz, maldito, ella no tiene nada que ver con esto.
—Oh, pero si es tan bonita, ¿no crees? 
—Viejo asqueroso.
—Suéltala o juro que te voy a matar infeliz —gruñó Henry. Miró al hombre y poco a poco lo comenzó a reconocer, estaba más viejo y calvo, pero era él—. Joshua Wilfert.
—El mismo… —dijo él sonriendo—. Ahora, haremos un trato. Sam viene conmigo y yo suelto a la pequeña aquí.
—Claro que…
—Está bien —respondió Sam—. Iré a donde quieras, pero déjala en paz.
—Sam…
—Es tu hija, yo puedo cuidarme. —Sam le respondió. 
Wilfert comenzó a caminar hacia atrás, no se había dado cuenta del auto estacionado ahí.
—Ven aquí, Sam Montero, en cuanto te tenga preso soltaré a la niña. 
—Rich… —susurró Henry, sintiéndose impotente. Poco a poco Sam se acercó a Joshua, no podía hacer ningún movimiento porque el hombre se preocupó de mantener el arma contra Rich en todo momento.
—Lo pasaremos muy bien, comisario. —Wilfert elevo el arma y disparó al hombro de Sam y luego una pierna.
—¡Arggg!
—¡¡Infeliz!! —Henry estaba a punto de ir contra el hombre, pero el arma nuevamente contra su hija, se lo impidió.
—Tranquilo, no morirá. Solo lo inmovilicé para que no escapara de mí. —Sam tenía su mano contra su hombro y su pierna a penas la podía mover—. Metete al auto, ahí, en el pasajero. Cuando estés ahí dejaré a la niña. —Sam miró a Henry y Rachel y asintió, metiéndose a duras penas, Wilfert caminó con Rachel hasta situarse en piloto del auto, se metió apuntando a la niña en todo momento, dejando a Henry sin oportunidad—. Nos vemos, Henry Togo. —Wilfert empujó a Rachel y aceleró saliendo de las tierras de Henry.
—¡Rachel! —Tomó a la niña en sus brazos mientras veía el auto alejarse.

12 comentarios:

  1. Me encanto el capitulo, me alegra que por fin Sam se anime a darle la oportunidad a Henry se nota que los se quieren y cuando las cosas parecian ir muybien sale el maldito de Joshua a arruinar las cosas, espero que rescaten a tiempo a Sam y esto sirva para que Henry y Sam por fin decidan estar al 100% junto, esperare el siguiente capitulo por que me dejaste un suspenso con lo que sigue.
    besos

    ResponderEliminar
  2. Hola Jen :)
    Espero disfrutes de tus vacaciones, bien merecidas por cierto. Me alegra saber que pronto podré leer la historia de Sam, yupi!!! que tengas una linda semana, besosss

    ResponderEliminar
  3. Hola...espero pases unas espectaculares y descansadas mini vacaciones antes de volver a clases... gracias por el capi.... que felicidad saber que Sam esta dando una oportunidad a Henry...ahora espero que Logan este de camino a buscar a Sam o que esten siguiendo al sucio de Joshua y pronto liberen a las niñas y esas escorias reciban su mas que merecido castigo.... a esperar la continuacion... un abrazo

    ResponderEliminar
  4. Me encanto el capitulo, que bueno que Sam le dio una oportunidad a la relacion, lastima que justo Joshua lo tomo de rehen,voy a estar esperando el siguiente capitulo con ansias. Un abrazote y que tengas una maravillosa semana de descanso.

    ResponderEliminar
  5. Iba a esperar a que la terminaras para leerla completa, pero aquí me tienes, volviendo a leer por capítulos. La cosa se está poniendo interesante, parece que el próximo capítulo va a ser emocionante. Besos.

    ResponderEliminar
  6. Espero puedas descansar un poco antes de reiniciar clases Jen. Y muchas gracias por el capítulo y como siempre quedamos en lo más emocionante. Un gran abrazo.

    ResponderEliminar
  7. Estuvo genial! Me encanta que el se de una oportunidad con Henry. Espero que Logan se enamore de Blayze, me gusta como suena y que al viejo cochino ese lo conviertan en abono para los cerdos.

    ResponderEliminar
  8. hola jen!!! feliz semana, gracias por otro capitulo me gusta que no lo alargues, y que suerte que sam y Henry estén mejorando su relación, espero que no le haga mas daño a sam!!! esos tiene que pagar jen!!! jajaja besos

    ResponderEliminar
  9. Ola,me ha gustado mucho tu blog y gracias x tu capitulo

    ResponderEliminar
  10. Gracias por el capitulo fue emocionante espero el proximo saludos fabi

    ResponderEliminar
  11. Me encantoooo!!! amiga , voy por el otro capi besiness

    ResponderEliminar
  12. Maravilloso el capitulo, muchas gracias por siempre compartir los capitulos con nosotros/as.

    ResponderEliminar

Wattpad

 
Uguale Amore © 2012 | Designed by Bubble Shooter, in collaboration with Reseller Hosting , Forum Jual Beli and Business Solutions